El Presidente Andrés Manuel López Obrador, conmemoró el día internacional del Trabajo con una comida junto a los principales líderes de federaciones, confederaciones y sindicatos del trabajador. La comida se realizó en el Salón Tesorería de Palacio Nacional, el cual fue adaptado con todo lo necesario para la reunión que tuvo como motivo primordial plantearle las principales inconformidades de los trabajadores de cada uno de sus sectores.
Frente a los dirigentes el mandatario federal dijo que se va a actuar “con mucho respeto a la autonomía sindical, no sólo es decirles democratícense, el Gobierno va a estar dando indicaciones, va a tener injerencia en la vida interna de los sindicatos, no va a tener dirigentes favoritos, habrá libertad sindical”, aseguró.
Entre los invitados estuvieron Carlos Aceves del Olmo, secretario general de la Confederación de Trabajadores de México; Francisco Hernández Juárez, secretario general del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana; Iván Burguete, del Sindicato Nacional de Trabajadores Indigenistas; Luisa María Alcalde, titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social; Napoleón Gómez Urrutia, presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Similares de la República Mexicana; Alfonso Cepeda Salas, Secretario General del SNTE y Gerardo Calderón, Secretario General del Sindicato de Trabajadores de Metlife.
También acudieron representantes del Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana, de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos, del Sindicato del IMSS, de la Confederación Regional Obrera Mexicana, entre otras representaciones estatales.
El presidente López Obrador exhortó a líderes sindicales a dejar a un lado los intereses gremiales y trabajar en unidad para alcanzar los cambios que necesita el país.
“Cada que sea necesario compartir puntos de vista con el Presidente de la República, yo expreso mi mano franca para dialogar”.
Además, pidió a los sindicatos modificar sus estatutos internos con el fin de adaptarlos a los cambios avalados por el Congreso de la Unión, al tiempo que hizo un llamado para poner fin a las costumbres que no están en la ley.
El Presidente destacó la importancia de contar con el apoyo del sector obrero para lograr la “cuarta transformación” por el camino de la concordia.
Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación (Segob), dijo que la reunión, se trata de un evento importante para el gobierno mexicano, ya que es la primera vez que un Presidente, se acerca en el Día del Trabajo con los representantes.
“El Presidente ha sido muy sensible a los abusos, según la OCDE y según desgraciadamente muchas de las agencias nos han colocado en que el salario del trabajador ha perdido el poder adquisitivo y que si hace 30 años estaba en los primeros ahora está en los peores, el Presidente siempre tendrá sensibilidad para las buenas condiciones de los trabajadores y sobre todo en los sueldos. El movimiento campesino significa nada más y nada menos que el desarrollo del país”.
El secretario general de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) y Senador de la República, Carlos Aceves del Olmo, participo he hizo un llamado a la unidad entre las organizaciones sindicales, pues dijo que si se pierde el tiempo con líos entre sindicatos, no ayudan al país como es necesario.
“Es muy importante la unidad y la conciliación que en vez de estarnos peleando entre nosotros haya unidad... que en vez de estar pensando en los intereses gremiales se piense en el interés superior”, comentó.
Aceves del Olmo pronunció su apoyo a la administración de López Obrador: “Deseo que a todos los obreros y sindicatos les vaya bien en esta tarea tan comprometida, pero tan apasionante. Trabajaremos con la esperanza de tener un mejor México. Tenemos fe en su Gobierno”.
“Es pérdida de tiempo las guerras de demandas de titularidad entre sindicatos, mejor hay que cuidar muy bien los derechos y los intereses de los trabajadores, mejor hay que atenderlos y hacer menos grilla”, finalizó.
Por Rodrigo Juárez
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